La polémica por la ausencia de artistas afroamericanos en las nominaciones, como así la aspera campaña presidencial en Estados Unido, se convirtieron en el eje central de la primera hora de la 88 entrega de los Premios Oscar al Cine que entrega la Academia estadounidense.
El comediante Chris Rock, vestido de etiqueta, con saco y camisa blanca y pantalón negro, no tardó ni un minuto, y con el sarcasmo de por medio, en meterse en la polémica sobre la nula presencia de artistas afroamericanos en las categorías.
"Esta es la 88 entrega de Oscar. No debe haber habido nominados negros unas 79 veces y nunca hubo protestas, pero porque había cosas serias por las cuales teníamos que protestar. Estábamos preocupados porque nos fueran a violar y matar", dijo con su gran sonrisa, pese a lo cual llamó a no boicotear los Oscar.
La ceremonia arrancó con un trailer de las películas de 2015, nominadas y no nominadas, tras lo cual el comediante apareció en el escenario y espetó: "Conté como a 15 personas negras en ese montaje. Estoy en los premios de la Academia Blanca, si nominaran al anfitrión no me hubieran dado el trabajo".
Rock hizo un largo monologo de apertura que fue bien recibido por el publico reunido en el Teatro Dolby de Los Angeles, y constantemente hizo equilibrio entre golpear con una mano y acariciar con la otra a la industria cinematografica.
En la primera media hora "Mad Max-Furia en el camino" gano tres estatuillas: a Vestuaria, Maquilla y Peluquería y Diseño de Producción, y aun le queda siete nominaciones a la fabula post-apocaliptica y rockera de australiano George Miller.
La primera categoría premiada fue la de "Guión original", ganada por "En Primera Plana", escrita por Josh Singer y Thomas McCarthy, también director, quien sostuvo que la película la hizo "por todos los periodistas que hicieron que todos los poderosos tuvieran que responder por las víctimas".
En año electoral y con la firme candidatura de Donald Trump en la interna republicana, la política también se metió en la ceremonia cuando el director y guionista de "La Gran Apuesta", Adam McKay, pidió que la gente "no vote a candidatos que reciben dinero de las petroleras y de las grandes empresas".
A su vez, como haciéndose cargo de las polémica racial, los organizadores tomaron las escenas más trascendentes de "Joy", "La chica danesa", "El Renacido y "Misión rescate", montando a los actores negros en esas partes Whoopy Golderg, Tracy Morgan y al mismo Chris Rock.
Sarah Silverman, comediante muy guarra, hizo chistes de sexo con James Bond y dio pie al primer show musical de la noche, de la mano de Sam Smith, quien interpretó la canción "Writings On The Wall", de la película "Spectre", el último filme sobre el agente James Bond.
