SOCIEDAD | encubrimiento | lucas | POLICIA

Crimen de Lucas: un comisario detenido se escudó en la "camaradería"

Es uno de los denunciados por encubrimiento. Dijo que nunca dudó de sus compañeros y que siempre consideró que hubo un enfrentamiento. Deslizó que, en los audios, fue sacado de contexto.

La causa por el crimen de Lucas González en manos de la Policía de la Ciudad avanza y hoy dos comisarios detenidos por el encubrimiento hablaron. Ambos se declararon inocentes y uno se escudó en la "camaradería" porque -dijo- siempre pensó que sus compañeros habían participado de un "enfrentamiento" y no que habían asesinado al adolescente.Según publica la agencia Télam, uno de los comisarios dijo que fue a la escena del hecho "por camaradería y compañerismo" ya que no se trataba de su jurisdicción y que "jamás" dudó de que se había tratado de un "enfrentamiento". El otro jefe policial, apresado este fin de semana, también se declaró inocente al ser indagado esta tarde por el juez Martín del Viso y el fiscal Leonel Gómez Barbella, quienes están a cargo del expediente.Se trata del comisario Rodolfo Ozán, de la Comisaría Vecinal 4 A; y su superior, el comisario inspector Daniel Santana, jefe de la jurisdicción de la zona de Barracas. Fuentes con acceso al expediente informaron a Télam que en su indagatoria, Ozán atribuyó a su "forma de hablar" el haberle dicho por teléfono a otro de los policías acusados que se había tratado de un "mocazo" lo ocurrido con Lucas y sus tres amigos.

"Opté por ir al lugar del enfrentamiento, lo volvería a hacer en caso de que se repita, por camaradería, por compañerismo", aseguró el comisario al recordar que tras escuchar una modulación fue a la escena donde Lucas y sus amigos fueron atacados, a pesar de que esa no era su jurisdicción ni estaba a cargo del procedimiento.

Tras decir que es "totalmente" inocente, Ozán admitió que fue él quien dio la orden de perimetrar el cruce de las calles Pedriel y Alvarado, donde fueron detenidos los dos amigos de Lucas, y que ordenó que nadie tomara registros del lugar. "Esto lo dije por el morbo que suele darse en esta clase de hechos, para preservar, pedí que no sacaran fotos y que nadie filmara", expresó.

El comisario relató que llamó a su superior Santana para explicarle lo ocurrido y que también habló con el detenido el jefe de la comisaría 4D, Fabián Du Santos, responsable de la jurisdicción en la zona donde ocurrió el hecho, conversación que dio sustento a la petición del fiscal para que tanto él como Santana fueran apresados.

"Puedo llegar a decir cagadón, chanchada, un mocazo, es mi forma de hablar", dijo el acusado respecto del contenido de las escuchas de su conversación con Du Santos y agregó que "al día de hoy" aún no entiende cómo fue la mecánica del hecho. "Hasta ese momento la película era el enfrentamiento, y no me cerraba como los fueron a parar así. Entonces a raíz de que no sé cómo fue la mecánica, yo respecto de lo que fue un mocazo, un cagadón, es lo que yo percibo", explicó.

Y sobre las órdenes que dio en el lugar, dijo que fueron dadas en base a lo que el creyó un enfrentamiento. "Mis órdenes fueron: custodien, vayan a buscar indicios, testigos presenciales, buscar cámaras, tal vez sacado de contexto suena de otra manera", se excusó.

En un tramo de la indagatoria, el comisario recordó haber hablado con la mamá de Lucas cuando el adolescente aún estaba vivo e internado en el Hospital Penna, de Parque Patricios, y dijo que a pedido de ella trató de gestionar el traslado del chico al Hospital "El Cruce" de Florencio Varela, y donde finalmente falleció.

Por su parte, el comisario inspector Santana fue indagado esta tarde por el juez y el fiscal de la causa y rechazó los cargos en su contra al igual que Ozán, aunque a diferencia de este sí aceptó responder preguntas, por lo que la audiencia se prolongó varias horas.

Por el homicidio calificado de Lucas y la tentativa de homicidio calificada de sus tres amigos están procesados con prisión preventiva los policías de la Ciudad Juan José Nieva, Fabián López y Gabriel Issasi. Mientras que por el encubrimiento están también con prisión preventiva los comisarios Juan Romero y Du Santos, el subcomisario Roberto Inca, el inspector Héctor Cuevas y las oficiales Micaela Fariña y Lorena Miño, quienes afrontan otros cargos como "falsedad ideológica, encubrimiento agravado, privación ilegal de la libertad agravada y vejaciones".

Además, el subcomisario Ramón Jesús Chocobar, y los oficiales Sebastián Baidon, Jonathan Alexis Martínez, Ángel Darío Arévalos y Daniel Rubén Espinosa, todos de la Comisaría Vecinal 4A de la Policía de la Ciudad, fueron apresados el domingo de la semana pasada por "encubrimiento agravado, privación ilegal de la libertad agravada y falsedad ideológica".

El asesinato de Lucas (17) sucedió cerca de las 9.30 del 17 de noviembre, cuando la víctima y tres amigos de su misma edad salieron de entrenar del club Barracas Central a bordo del Volkswagen Suran del padre de uno de ellos y fueron interceptados por un auto Nissan Tiida de la Brigada de Investigaciones de la Policía de la Ciudad sin patente ni signos de ser policial, del que bajaron tres efectivos armados y sin identificar.

De acuerdo con las pruebas recabadas, los adolescentes creyeron que eran ladrones que iban a robarles, por lo que huyeron del lugar, momento en que los policías les dispararon desde distintos ángulos. Al menos cinco tiros dieron en el auto y uno de ellos impactó en la cabeza de Lucas, quien horas más tarde murió.



Dejá tu comentario