"La muerte de Lucas es una pérdida irreparable", declaró este jueves por la noche Horacio Rodríguez Larreta, cuya Policía a su cargo asesinó a tiros al joven de 17 años Lucas González cuando volvía de entrenar con sus amigos desde el Club Barracas Central.
"Me siento profundamente dolido", dijo también el alcalde de CABA y en el mismo mensaje (emitido a través de redes sociales) les envió su "más sentido pésame a sus padres, familia y amigos".
A Lucas lo fusiló la maldita policía: manual para asesinar sueños
"Seremos inflexibles con los policías que actúen fuera de la ley", dijo también, utilizando iguales palabras que las que minutos antes había expresado el ministro de Seguridad porteño, Marcelo D’Alessandro en conferencia de prensa.
"La muerte de Lucas", dijo Rodríguez Larreta en un ejercicio ya conocido cuando se le quiere quitar gravedad a un hecho. A Lucas González lo asesinó la Policía de la Ciudad; Lucas González no se encontró a la muerte en una accidente ni por una enfermedad. A Lucas, como a tantos otros y otras, lo mató la Policía.
En redes sociales justamente es que Larreta encontró los cuestionamientos que jamás se cruza en los medios que lo entrevistan.
