Esta semana el gobierno de Javier Milei anunció que se evitaría la renovación de 15 mil contratos de trabajadores del Estado con vencimiento al 31 de marzo. 15 mil personas que dejan de tener empleo, 15 mil familias que pierden un ingreso o su único ingreso. En ese marco, el propio Presidente Milei afirmó, ante el foro de empresarios en el que derrapó (otra vez) con metáforas sexuales, que los despidos o no renovaciones de contratos llegarán a 70 mil.
Con estos números las redes sociales estallaron entre quejas de quienes se quedan sin trabajo y festejos y cargadas por parte de los militantes "libertarios" y hasta funcionarios nacionales o distritales que también celebraron la ola de despidos.
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En el segundo grupo de quienes celebraron el ajustazo en el Estado se encuentra el flamante empleado estatal conocido en redes como "Juan Doe", cuyo nombre real es Juan Pablo Carreira.
Carreira se sumó a la planta de trabajadores del Estado en febrero último, cuando fue nombrado Director de Comunicación Digital del Gobierno.
En paralelo, el joven adherente de Milei es editor del portal La derecha radio, que se ocupa de difundir fake news y resaltar las medidas del Gobierno.
Durante la campaña electoral "Juan Doe" defenestraba al Estado junto al resto de los fans de Milei y decía a viva voz que "nunca" trabajaría para el Estado. La proclama le duró hasta que le ofrecieron un cargo por el que no cobra (por arriba de la mesa) menos del equivalente a 2 mil dólares.
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Pero este jueves Juan Pablo "Juan Doe" Carreira desbloqueó un nuevo nivel de miserabilidad al celebrar los 70.000 despidos prometidos por la Casa Rosada.
El método fue rápido, muy habitual en X/Twitter: tomar un post, citarlo y agregar una imagen en modo meme. En el caso de "Juan Doe" fue con un fotograma de un personaje de Dragon Ball, ícono del manga japonés muy consumido por los adolescentes que se autoperciben libertarios.
La publicación del flamante empleado estatal Juan Pablo Carreira fue festejado a su vez por sus seguidores, que repitieron algunos clichés de los que lanza a menudo el oficialismo y que tienen un denominador común: toda persona despedida del Estado es kirchnerista y merece quedarse sin trabajo.
Signos de época.
