La gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, decidieron ponerle fin a su relación luego de 17 años de matrimonio. La razón de la ruptura sería que sus nuevos cargos políticos habrían generado un desgaste en el vínculo.
"Hemos decidido con Ramiro separarnos", dijo Vidal en declaraciones a la prensa durante una acto que encabezó este lunes en la localidad bonaerense de Villa Elisa.
Allí, a partir de la consulta de diferentes medios, la mandataria provincial destacó que junto a Tagliaferro "hemos pasado juntos muchos años y hemos tomado la decisión en conjunto pero seguimos teniendo una muy buena relación porque es un vínculo de muchos años".
"Además, nuestra prioridad, como debe ser, es cuidar a nuestros hijos, es que ellos estén protegidos y se sientan acompañados en este proceso que todos como familia vamos a atravesar", agregó la gobernadora.
Finalmente, Vidal dijo que no iba a ampliar más detalles porque "es todo lo que tengo que decir", aunque reiteró que "es una decisión que tomamos los dos juntos y que como familia vamos a atravesar juntos. Pero quiero proteger no sólo mi intimidad y la de Ramiro, sino la de mis tres hijos".
Los motivos
El deterioro en la relación empezó en la segunda mitad del año pasado, cuando ambos estaban en plena campaña electoral. Ahora, Vidal trabaja en la gobernación provincial desde La Plata, mientras que Tagliaferro - según cuentan sus allegados - llega a pasar jornadas de 14 horas en Morón, entre actos y reuniones. Así, la pareja estaba poco en su casa y se veía de a ratos.
Vidal y Tagliaferro se conocieron en la Universidad Católica Argentina y se casaron en diciembre de 1998. Tienen tres hijos: Camila, de 15 años; María José, de 13 y Pedro, de 7.
La gobernadora, a mitad de año, tenía planificado mudarse a la Base Aérea de Morón, en El Palomar. Habrá que ver si la reciente separación la hace mantener su decisión.